Gentes de
alma rural se está apoderando de nuestros pueblos, incluso de nuestras
ciudades. Son sumamente tranquilas y llevan ritmos pausados. Pueden distinguir
el trigo, el centeno y la cebada con sólo un vistazo. Saben si va a llover
mirando al cielo. A veces pisan barro al salir de casa. En las fiestas
patronales cuelgan banderines de Estonia, Suecia,Austalia, de la Junta y la
Diputación. Les importa un comino si ha salido ya el último Iphone. Gritan
“otra o al pilón” si les gusta mucho una canción y no como una frase
hecha. En sus ratos libres riegan los tomates.
¡¡CUIDADO!! Si se las encuentra quizá
quieran regalarle una docena de huevos y un par de calabacines.
ESTÁN AVISADOS.