Descripción
Agapito Marazuela (1891-1983) Segoviano eterno que compuso y rescató del olvido incontables músicas, ritmos y canciones y recopiló todo su saber en el que es hoy el libro de cabecera de las gentes de la música tradicional castellana: “Cancionero de Castilla la Vieja” ( 1932) Agapito pasó la posguerra preso de la dictadura recorriendo varias cárceles. Sus compañeros que iban a ser fusilados pidieron como última voluntad que Agapito tocara la guitarra antes de su muerte, para espantar el miedo. Esto marcó mucho a Marazuela que, durante un tiempo, dejó de amar la música y de tocar porque para él estaba ligada a la muerte y al horror. Pero finalmente la retomó porque sus compañeros de prisión le pedían escuchar la música de Agapito que les daba un viento de libertad. Nunca volvió a dejarlo. Tras salir de prisión dedicó su vida a componer y a recopilar mucha de la música que hoy es nuestro mayor tesoro.
“Al final, comprendiste que nadie levantaba ya a aquellos fusilados y que otros camaradas necesitaban sentir la libertad que tú dabas con la guitarra. Hiciste durante tres meses trémolos sin parar, y un domingo diste aquel maravilloso concierto, que empezó con el Capricho español, y que fue lo último que habías tocado aquella noche cuando fusilaron a los tres compañeros” José Ortega
Agapito Marazuela es un frasco de las esencias de esta tierra, un recuperador de saberes, un espantador de tormentas y un encantador de serpientes.